Estas son las piezas diseñadas para el proyecto de branding del restaurante de hamburguesas Black Bull Burger realizado en el año 2018.
Cuando nos embarcamos en el desafío de diseñar la identidad de Black Bull Burger, una peculiaridad captó de inmediato nuestra atención: ¡cada palabra del nombre comenzaba con la letra «B»! Este detalle nos inspiró a simplificarlo todo en una sola letra B mayúscula y usarla como la base para el logotipo.
El proceso creativo fue espontáneo. Mientras garabateábamos en nuestro cuaderno de bocetos, surgió una idea intrigante: utilizar un paréntesis o una llave para envolver las tres palabras, representando los cuernos de un toro. Al seguir explorando, se nos ocurrió dar un giro divertido, inspirado en los primeros días de los emoticonos en la mensajería de texto. Incorporamos los dos puntos «:» y la letra «B» para crear una cara de toro estilizada }:B
El resultado es un logotipo ingenioso, minimalista y sorprendente. Lo más fascinante es cómo juega con la percepción. Al principio, muchas personas no reconocen el toro de inmediato. Pero cuando finalmente lo descubren, ese instante de revelación genera un «¡wow!» inolvidable, haciendo que el diseño sea tanto memorable como cautivador.
Nuestro cliente nos solicitó un diseño interior que reflejara un estilo industrial y rústico, con mesas de hierro y bases de madera pulida, además de ductos de aire acondicionado expuestos en el techo, aportando un toque auténtico y urbano al espacio. El color negro fue elegido como base para reforzar este concepto, y para añadir dinamismo y acentuar la estética industrial, integramos el amarillo como color de contraste. El resultado es un ambiente único que combina robustez y calidez, perfectamente alineado con la identidad de Black Bull Burger.